El siglo XXI se caracteriza por el rápido desarrollo de la tecnología. Todo aquello que hace años nos parecía estar a la última ahora, probablemente, esté obsoleto: aparatos que empleábamos para cumplir una sola función (como DVDS, mp3 o GPS) han sido reemplazados por Smartphones, funcionalidades incorporadas a determinados aparatos ahora ya no se utilizan y el desuso de algunas herramientas ha llevado a la desaparición de algunas profesiones.
La veloz evolución de la tecnología ha dado lugar a numerosas y fantásticas herramientas, como son las redes sociales.
La revolución de las redes sociales
Las redes sociales han cambiado por completo la forma de comunicarnos. Cualquier usuario con cuenta en alguna red social puede utilizarla como herramienta de difusión a nivel global. La popularidad de las redes sociales y su evolución, primero como acción social y después como estrategia corporativa, nos permite tener una perspectiva más amplia de qué tipo de prácticas son adecuadas en una red social y cuáles no lo son.
Cuando las marcas vieron en las redes sociales una plataforma más desde la que llegar al público surgió una figura necesaria para gestionar las comunidades sociales, controlar comentarios y mediar ante posibles disputas. Se daban los primeros pasos para crear un nuevo perfil profesional: el community manager.
La importancia del Community Manager
El community manager construye, gestiona y mejora los medios de comunicación online de las marcas. ¿Para qué lleva a cabo todas estas acciones? Para proyectar la imagen de marca que desea que tenga su público objetivo, entre otros motivos.
Obviamente esta acción no se puede llevar a cabo exclusivamente en las redes sociales de una empresa, sino que tiene que formar parte de la estrategia global de comunicación de la marca. Las habilidades que debe tener un community manager son numerosas. Hemos recogido un breve listado con las que consideramos más relevantes.
Las habilidades del Community Manager
Captar la atención del público objetivo de una marca no es una tarea fácil. Especialmente porque cada día está siendo “bombardeado” por cientos de marcas que buscan promocionar sus productos y servicios.
Si estás pensando en dedicarte a esta profesión estas son las habilidades que más valoran las marcas y empresas:
- Saber expresarse con propiedad poniendo el valor los principales atributos de la marca es imprescindible.
- Tiene que encantarte lo que haces. No todo el mundo está preparado para extraer contenido alucinante de marcas que no lo son o saber gestionar una crisis de reputación online.
- Dotes para redactar. Que hay que saber escribir bien, sin faltas de ortografía y con todos los signos de puntuación, debería ser obligatorio para cualquier puesto de trabajo. Pero cuando se trata de un empleo en el que el resultado de lo que generas en nombre de una marca lo puede leer cualquier persona, el cuidado por el lenguaje y la escritura debe ser extremo.
- Saber escribir bien es importante, pero hacerlo de forma creativa también lo es. Captar la atención de un usuario que ya no se fija en nada es bastante complicado. Por eso es fundamental conocer a tu público objetivo a la perfección y cuáles son sus contenidos favoritos.
- Una de las múltiples ventajas que ofrecen las redes sociales es que nos permiten medir la repercusión de lo que publicamos en ellas. Ya sea a través de un post o una nueva campaña publicitaria, mediante las herramientas de análisis podremos ver a cuánta gente se ha alcanzado y el impacto que ha tenido. Esto nos permite saber si el contenido que estamos creando genera interés o si debemos cambiarlo.
- Ágil. Debe tener una veloz capacidad de reacción ante lo que sucede alrededor y una mente habilidosa para contestar con gracia ante los posibles dramas online que puedan surgir (como dar respuesta ante valoraciones negativas de productos o comentarios desafortunados de alguien de tu organización)
El impacto positivo que la figura del community manager ha creado para marcas, asociaciones y empresas es tal que se desde hace años se celebra, el cuarto lunes de enero, el Día Internacional del Community Manager.
Como hemos visto, las funciones de un CM no son pocas ni sencillas, pero con habilidad y esfuerzo se ha conseguido dignificar uno de los puestos de trabajo con mayor proyección.
