Estamos en la semana del Black Friday y la gran mayoría de empresas está llevando a cabo ya sus campañas para sacarle el máximo partido a esta semana en la que el volumen de ventas se dispara.
Pero es común que en esta clase de campañas tan puntuales pero intensivas, y en las que hacerse ver entre todas las promociones es complicado, las marcas cometan errores que hagan que su campaña de Black Friday no les traiga los resultados esperados.
A continuación, explicamos varios de estos puntos a los que las marcas no suelen prestar la atención suficiente a la hora de desarrollar sus campañas para la semana negra:
No planificar con antelación la campaña:
- El Black Friday puede pillarnos por sorpresa, que cuando nos demos cuenta solo quede una semana para la fecha clave y acabemos elaborando una campaña a contrarreloj sin una estrategia bien definida detrás.
No integrar bien los diferentes medios o no seleccionar los adecuados:
- Usar solo un medio de comunicación o no combinarlos adecuadamente en la misma estrategia.
- Así como centrarse únicamente en estrategias online u offline sin integrar ambas si lo que quieres promocionar es tu negocio físico.
No tener en cuenta el diseño responsive:
- Centrarse solo en el móvil o el ordenador, generando landing pages, newsletters, etc. que no se vean bien en todos los dispositivos.
No darle la importancia necesaria a la creatividad:
- Si tus contenidos no son originales y no destacan, se perderán entre la multitud de campañas de la competencia.
- La clave está en conseguir la diferenciación para que se fijen en ti.
No destacar lo suficiente la oferta:
- Por ejemplo, si entras en una tienda online, la promoción del Black Friday debe aparecer al inicio de todo y no a la hora de finalizar la compra.
No transmitir un mensaje claro:
- Los usuarios van a mirar tus anuncios durante apenas un segundo, el mensaje que quieres conseguir tiene que ser muy simple y rápido de percibir.
- Por ejemplo: “20% de descuento” y el botón de “Comprar” va a ser mucho más visual que si pones demasiado texto o no dejas claro a simple vista cuál es la acción que quieres conseguir en el usuario. En este caso es posible que ni lleguen a leer tu anuncio.
No prestar una buena atención al cliente:
- Facilita que el cliente pueda ponerse en contacto con tu marca por varias vías diferentes y, sobretodo, sé rápido respondiendo.
No tener stock suficiente:
- Si te quedas sin stock en tu tienda online o física en el propio Black Friday no solo vas a perder una cantidad importante de ventas y clientes potenciales, sino que vas dar una mala imagen de marca.
Dirigir solo la campaña a los clientes actuales:
- Nunca debemos dejar de lado nuestros clientes fieles, pero en campañas como ésta se debe aprovechar también la posibilidad de llegar a nuevos clientes que después podremos fidelizar.
Promocionar únicamente descuentos:
- Es cierto que los descuentos son el principal atractivo del Black Friday, pero en función de lo que vendas y cómo te posiciones en el mercado, te puede interesar promocionar algún servicio adicional, vender packs de productos o aprovechar para lanzar algún producto nuevo que solo se pueda adquirir a lo largo de esta semana.
A pesar de que esta lista todavía podría ampliarse mucho más, en términos generales, la mayoría de estos errores se pueden evitar con una buena planificación y unos objetivos bien definidos para la campaña.